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Hablamos de ultrasonidos como una emisión de vibraciones mecánicas superiores a 20Khz. En Deep Slim® hemos apostado por desafiar esta tecnología creando la emisión MULMI (Multifocused Ultrasound Low Mechanical Index).
Una tecnología de ultrasonidos multifocalizados no invasivos de baja frecuencia (rango no superior a 1Mhz) e intensidad (rango inferior a 1 W/cm2).
Esta exclusiva entrega de energía multifocal, actúa en un área mucho mayor, conteniendo múltiples lóbulos de radiación y constituyéndose en un deposito de energia de foco disperso.
Una de las grandes ventajas de la tecnología MULMI es que provoca efectos mecánicos sobre el tejido hipodérmico de forma no térmica, y siempre por debajo de los umbrales de la cavitación. De esta forma, desarrolla estimulaciones mecánicas en los tejidos originando mecanismos de mecanotrasducción celular.
Gracias a la tecnología MULMI, el equipo Deep Slim® actúa cambiando la configuración celular (como podemos observar en cortes histológicos), debido a los fenómenos de estrés y relajación mecánica que experimenta la grasa subcutánea.
Esta tecnología provoca de forma simultánea que el tejido conectivo transmita señales de carácter mecánico hacia y desde las fibras, dando paso a respuestas inmunes, vasculares y de los nervios del tejido hipodérmico.
De esta forma, es posible tratar el tejido hipodérmico en su conjunto (grasa/adipocito y colágeno/tejido conectivo) simultáneamente en cada disparo.
Entre los efectos no térmicos asociados a la acción de la presión acústica sobre el tejido, se distingue la interacción de la onda con la célula, más concretamente con su membrana plasmática y con los receptores de presión que en ella se encuentran (mecanorreceptores).
Así mismo, al presentar nuestra tecnología un IM (Índice Mecánico) por debajo del umbral de cavitación se ven implicados los siguientes fenómenos no térmicos:
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